Estimado lector: Si yo
lo insultara, usted se sentiría ofendido inmediatamente. Si lo avergonzara,
usted sería el primero en darse cuenta. Pero si yo lo engañara...es posible que
nunca lo descubriera.
No importa que tanto lo
insultaran o lo avergonzaran, por lo menos usted estaría consciente de lo que
está ocurriendo. Pero el engaño puede ser mortal, porque usted no se daría
cuenta que lo están traicionando, despistando, seduciendo o embaucando. Sería
peor que un astuto juego de manos.
La gente engañada ni
siquiera se da cuenta de que la están embaucando, a menos que la enfrenten con
la verdad. Lo trágico es que muchos van a la tumba engañados acerca de su
relación con Dios.
LA IMPORTANCIA DE SU FUENTE DE LA VERDAD
¿Cuál es su fuente de
la verdad? ¿Cuál es su fuente de información en cuanto a la vida eterna?¿Es
digna de confianza esa fuente? ¿Lo protegerá de los ardides y mentiras de
Satanás, el maestro engañador?
El profeta bíblico
Jeremías dio consejos muy sabios para escoger en quien confiar. Dijo que si uno
pone su confianza en el hombre será maldecido como un arbusto seco en un
desierto estéril. En cambio, si nuestra confianza está puesta en Dios, Jeremías
dijo que floreceremos como un árbol plantado junto a las aguas (Jeremías
17:5-8).
Sin embargo, en la
actualidad muchas personas pasan por alto el consejo de Jeremías para la
búsqueda de la verdad y ponen su confianza en el hombre --líderes religiosos--y
no en Dios.
¿EN QUIÉN CONFIARÁ USTED?
Los católicos, por
ejemplo, creen que el papa y la Iglesia Católica Romana enseñan exactamente lo
que Jesús y la Biblia enseñan. ¿Pero cómo saben si las enseñanzas del papa o
los dogmas de la Iglesia Católica Romana son la verdad?
La única forma en que
podemos estar 100% seguros es haciendo lo mismo que hizo la iglesia de Berea en
los días del Nuevo Testamento. Ellos examinaron las Escrituras para ver si lo
que el apóstol Pablo les enseñaba era cierto (Hechos 17:11).
Debemos usar esa misma
norma bíblica para verificar las enseñanzas de todos los líderes religiosos. El
no prestar la debida atención a la verdad objetiva de la Palabra de Dios, y
seguir las enseñanzas subjetivas de los hombres, puede ser un trágico error.
EL PELIGRO DEL ENGAÑO
¿Le sorprendería
enterarse de que muchas enseñanzas religiosas son contrarias a la Biblia?
¿Acaso no debería preocuparse por eso, puesto que su destino eterno quizás
dependa de tales enseñanzas?
Aquí mostramos la forma
en que la doctrina Católica engaña a la gente acerca del plan de salvación que
Dios ha establecido:
Todas las gracias
necesarias para obtener la vida eterna pueden lograrse por méritos propios
(Catecismo de la Iglesia Católica, 2027).
Los católicos son
renacidos como hijos de Dios y librados del pecado mediante el bautismo por
agua (1213).
El purgatorio es un
fuego purificador que nos ayuda a conseguir la santidad necesaria para entrar
al cielo (1030-31).
Jesús es ofrecido
diariamente como una víctima de sacrificio en los altares Católicos (1367).
Los pecados veniales no
merecen el infierno (1863).
Los Católicos pueden
expiar sus propios pecados realizando actos de penitencia (1459,1477).
La Biblia declara que
el hombre se salva por creer en la verdad de Dios (Efesios 1:13-14). Dios jamás
podría engañar a nadie (Tito 1:1-2). Pero el hombre permanece condenado si
continúa en el engaño.
Los sistemas religiosos
falsos mantienen a la gente esclavizada en el engaño porque pervierten la
verdad y la gracia de Dios. Cualquier religión que enseñe a sus adeptos que la
salvación se obtiene mediante el esfuerzo o mérito humano está anulando la
gracia de Dios. Sin embargo la gracia es el único medio por el cual Dios salva
a los pecadores. La Biblia dice, "Y si por gracia, ya no es por obras; de
otra manera la gracia ya no es gracia" (Romanos 11:6).
UNA FE MAL ENFOCADA
Algunas personas ponen
ciegamente su fe en líderes religiosos, suponiendo que sus líderes nunca
engañarían a nadie con un plan de salvación falso. Sin embargo, el apóstol
Pablo advirtió que, "Y de vosotros mismos se levantarán hombres que hablen
cosas perversas para arrastrar tras sí a los discípulos" (Hechos 20:30).
Otras personas
simplemente deciden no responder ni conformar sus vidas a la verdad. En cambio,
le vuelven la espalda y acuden a los maestros que les dicen lo que ellas
quieren oír (2 Timoteo 4:2-4).
También hay gente que
tiene celo por Dios, pero no según la verdad. A muchas personas que han sido
adoctrinadas con falsas enseñanzas les resulta difícil creer en la verdad. No
pueden porque no quieren desechar las creencias antibíblicas a las que se han
acostumbrado.
Fue la desobediencia a
Dios, una falta de fe en su propósito, su plan y su palabra lo que separó a
Adán y a Eva del Creador. En cambio, escogieron poner su fe en el engañador, lo
cual nos trajo la muerte espiritual y física a todos nosotros.
Dios usa el mismo
instrumento que nos separó de él --la fe-- para restaurarnos de nuevo a la
comunión con él. Cuando nos arrepentimos de nuestras obras muertas y acudimos a
él en fe, recibimos vida espiritual y eterna: "Porque por gracia sois
salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por
obras, para que nadie se gloríe"(Efesios 2:8-9).
LA VERDAD DE DIOS
DETERMINA EL DESTINO ETERNO
La Biblia establece con
absoluta claridad que:
Somos hijos del diablo
(Juan 8:43-45) o hijos de Dios (Juan 1:12).
Vivimos como esclavos
del pecado o esclavos de la justicia (Romanos 6:16-18).
Pasaremos la eternidad
sufriendo la ira de Dios o gozando de su cariñosa presencia:
"El que en él
cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha
creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios" (Juan 3:18).
Dios ha revelado que el
confiar en cualquier cosa, aparte de Cristo y su Palabra, es evidencia del engaño.
Los que escogen seguir las tradiciones, opiniones y filosofías de los hombres
serán condenados. Jesús dijo "El que me rechaza, y no recibe mis palabras,
tiene quien le juzgue; la palabra que he hablado, ella le juzgará en el día
postrero" (Juan 12:48).
En contraste, cuán
maravillosas son las palabras: "Mas a todos los que le recibieron, a los
que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios"
(Juan 1:12).
¿Está usted basando su
vida y destino eterno en las verdades eternas de la Palabra de Dios o en las
tradiciones católicas añadidas a la verdad de Dios? Compare estas enseñanzas de
la Iglesia Católica Romana con las enseñanzas fundamentales de la Biblia:
El Papa y su iglesia enseñan que... La salvación es mediante la Iglesia Católica
Romana y sus sacramentos (846,1129). Dios y su Palabra enseñan que... La
salvación es sólo mediante Cristo (Hechos 4:12).
El Papa y su iglesia enseñan que... Uno se salva por la fe, más las obras
(1815,1821,2010,2027). Dios y su Palabra enseñan que... Uno se
salva por la fe y no por las obras (Efesios 2:8-9).
El Papa y su iglesia enseñan que... La obediencia a los mandamientos es necesaria
para la salvación (2068). Dios y su
Palabra enseñan que... Todos los que piensan salvarse por cumplir la ley --
mandamientos-- están bajo maldición (Gálatas 3:10).
El Papa y su iglesia enseñan que... La salvación es un proceso que va desde el
bautismo hasta el purgatorio (161,162,1254,1255). Dios y su Palabra enseñan que... La salvación ocurre en el momento
que uno se arrepiente y cree al evangelio (Hechos 20:21; Efesios 1:13).
El Papa y su iglesia enseñan que... El purgatorio purifica del pecado (1030,1031).
Dios y su Palabra enseñan que... Sólo Jesús nos purifica del pecado (Colosenses
1:22, Hebreos 1:3).
El Papa y su iglesia enseñan que... Uno peca si presume que es salvo sin mérito
(2090-2092). Dios y su Palabra enseñan
que... Uno puede saber que tiene vida eterna (Juan 10:27-30; 1 Juan 5:13).
El Papa y su iglesia enseñan que... El sacrificio de Jesús continúa en la misa
diaria (611,1405). Dios y su Palabra
enseñan que... El sacrificio de Jesús fue completo y para siempre (Juan
19:30).
Como puede verse, estas
enseñanzas se oponen una a la otra completa y directamente. Una es la verdad
que lo libertará. La otra es un engaño que lo mantendrá en esclavitud.
¿Cuál enseñanza
escogerá usted? Escoja con cuidado. En esta vida usted puede equivocarse acerca
de muchas cosas y todavía puede sobrevivir. Pero cuando esta vida se termine,
si se ha equivocado con respecto a la única provisión que Dios ha hecho por sus
pecados, usted perecerá en el lago de fuego por toda la eternidad.
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Leer también: PREGUNTAS BÍBLICAS PARA CATÓLICOS
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Las citas bíblicas son
de la Versión Reina-Valera, edición
1960. Las referencias del catecismo son del Catecismo de la Iglesia Católica,
1994, Librería Editrice Vaticana.
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