“…derribando argumentos y toda altivez que se
levanta contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a
la obediencia a Cristo” (1 Corintios 10:5).
Algunas preguntas son de gran importancia, pero
fáciles de responder, como por ejemplo: ¿Es prudente conducir a 150 km/h cuando la
velocidad límite es de 40
km/h ? Por supuesto que no, y sería una imprudencia con
graves consecuencias si un conductor desconociera este hecho.
Otras preguntas son complejas, pero no son tan
importantes ¿Cuál es la raíz cuadrada de 983.297? Es una pregunta difícil, pero
no nos afectará si nos equivocamos (salvo que se quiera estudiar matemáticas en la universidad…en ese caso, convendría que nos pusiéramos a
estudiar ¡ahora mismo!)
Las preguntas en estas páginas, además de ser
difíciles, son importantes. Las respuestas serán categóricas porque impactarán
nuestra vida. Tratan sobre Dios y el mal, la fe, la justicia, el dolor, las
relaciones, el amor, y la vida y la muerte. Son complejas porque las respuestas
no son obvias y pueden ser controvertidas. Procuramos presentar las preguntas
de una manera novedosa, con el propósito de ayudarnos a diferenciar lo
verdadero de lo falso. Son preguntas comunes que toda la gente se hace. Tal
vez, tú mismo te las planteas; o quizás alguien las usó para cuestionar tu fe.
Las preguntas se basan en suposiciones que la gente
acepta consciente o inconscientemente. Las suposiciones son creencias u
opiniones; aquello que damos por sentado porque lo aprendimos de los amigos, la
familia, la escuela, los libros, las películas…vaya uno a saber dónde. Sin
embargo, como cualquier otra idea, las suposiciones deben examinarse.
¿Son verdaderas estas suposiciones? Cuestionar las
suposiciones servirá para entender lo que creemos y para ver las cosas desde
otro punto de vista. Si las suposiciones son erradas, es posible llegar a
conclusiones erróneas. Si descubres que tus suposiciones no corresponden a la realidad, tal vez convenga cambiarlas.
Si Dios existe: ¿Qué implica esto para tu vida? Si Él
se ha revelado: ¿Cómo es? ¿Qué tiene que decirte?
-------------------------
Pregunta 01
¿Importa lo que creo o lo que dejo de creer?
Suposición
Las creencias no importan. Lo único que importa en
la vida es obtener lo que deseamos. Con tal que seas feliz, no importa lo que
creas.
Cuestionamiento
Supongamos que ves
el auto deportivo de tus sueños, en perfecto estado, en un sitio de Internet.
El vehículo está impecable. Te entusiasmas tanto que usas todo el dinero que
tienes ahorrado para comprarlo. Pero cuando te entregan el auto, ¡que
desilusión! Tiene el motor fundido, los neumáticos pinchados, y hay varias
partes oxidadas en la carrocería. ¡Te estafaron!
Estabas convencido
que el auto estaba en perfectas condiciones, pero no verificaste si era verdad
lo que creías. Las ideas que te formaste sobre el auto determinaron lo que
hiciste con tu dinero. Lo mismo pasa en la vida. Lo que creas a cerca de la
vida y del mundo en que vives determinará como vives y lo que harás con tu
futuro. Es importante examinar detenidamente nuestras creencias para ver si son
ciertas. Nadie quiere pasar su vida haciendo algo vano. La vida es mucho más
importante que un auto deportivo, los celulares, la moda o los videojuegos. Los
avisos comerciales prometen diversión y popularidad si compramos tal o cual
producto; aunque, en el fondo, nadie desea que la vida se limite a eso.
Queremos que nuestra vida tenga sentido, que valga la pena y sea significativa.
Puede que haya sido
emocionante comprar un auto deportivo, pero al final, no valió la pena. Las
creencias no “sirven” realmente si son falsas y hacen que nos equivoquemos.
Cuanto más importante sea el tema en cuestión, tanto más peligroso será creer
algo que sea una falsedad.
Piensa en las consecuencias
Lo que creas acerca
de Dios afectará todas tus decisiones y resultará en beneficio o en perjuicio para
tu vida. Además, Él prometió guiarnos a la verdad y darnos el entendimiento
mientras transitemos por la vida. Solo tenemos que pedírselo. El Señor Jesús dice:
“Pidan, y se les dará; busquen, y encontrarán; llamen, y se les abrirá” (Mateo
7:7). Pero esta invitación viene acompañada de una pregunta: ¿Cómo puedes pedir
ayuda a Dios si no conoces al Dios que buscas? Procurar conocer al Dios vivo y
verdadero es una de las actitudes más seguras y sólidas que puede adoptar una
persona.
“Si el cristianismo es falso, no tiene importancia;
pero si es verdad, su importancia es infinita. Lo único que el cristianismo no
podría ser es medianamente importante.”
--------------------
Pregunta 02
¿Acaso no son todas las religiones iguales?
Suposiciones
Todas las religiones, incluso el cristianismo,
enseñan prácticamente lo mismo. Son solo caminos diferentes para tener una vida
mejor y cultivar la espiritualidad.
Cuestionamiento
¿Alguna vez buscaste en Internet el mapa de una
ciudad para averiguar cómo llegar a una dirección, pero a pesar de seguir las
indicaciones, te perdiste porque el plano tenía errores? Las calles no cruzaban
exactamente como estaba representado, y las instrucciones decían que había que
doblar a la derecha cuando, en realidad, había que doblar a la izquierda. Un
buen mapa representa fielmente las calles y no tiene imprecisiones geográficas.
Las religiones son como los mapas de la vida.
Proponen afirmaciones acerca del mundo. Intentan responder a las interrogantes
de la vida: ¿De dónde venimos los seres humanos? ¿Por qué está el mundo como
está? ¿Cómo lo arreglamos? ¿A Dónde iremos cuando esta vida termine? Los
diferentes sistemas de creencias (religiosos o no religiosos) proponen
diferentes respuestas. El ateísmo afirma que Dios no existe; el cristianismo
afirma que Dios nos creó.
El hinduismo afirma que seremos reencarnados después
de morir; el cristianismo afirma que solo vivimos una vez. Para el islam, Jesús
fue un profeta más; para el cristianismo, Jesús es Dios en forma humana.
Muchas creencias necesariamente deberían ser falsas
porque, por lógica, todas no pueden
ser verdad.
Superficialmente, algunas religiones pueden parecer
similares porque plantean preguntas parecidas, pero las respuestas son
diferentes. Por ejemplo, tanto el cristianismo como el budismo enseñan sobre la
paz. Sin embargo, hay una diferencia: para el budismo, la paz significa perder
la propia identidad en el universo y no desear más nada. En el cristianismo, la
paz implica un profundo deseo de tener una relación con Dios. Si profundizamos
en lo que realmente enseñan las religiones y otros sistemas de creencias,
veremos que postulan cosas distintas acerca del mundo y responden de manera
diferente a los interrogantes de la vida. Si los postulados de la fe cristiana
son verdaderos, las religiones que enseñan una cosa distinta sobre el mundo se
asemejan a los mapas con instrucciones erradas: no servirán para llegar bien al
destino.
Piensa en las
consecuencias
El Señor Jesús no es un simple líder religioso: Él
no afirma que vino a mostrar el
camino a Dios, dice que Él es el
camino. El Señor Jesús dice: “Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie
viene al Padre, sino por mí” (Juan 14:6). Dios se reveló en la persona de
Jesucristo y nos invita a tener una relación con Él para conocer la verdad
sobre la religión. El Señor Jesús es el mapa perfecto que nos guía a Dios.
“Tenemos derecho
a creer lo que queramos, pero no todo lo que creamos es cierto.”
--------------
Pregunta 03
¿Acaso puede alguien afirmar que conoce la verdad?
Suposición
Nadie puede saber cuáles creencias religiosas son
verdaderas o falsas; los cristianos, por lo tanto, tampoco pueden afirmar qué
es la verdad. La verdad es relativa.
Cuestionamiento
El relativismo alega que no podemos determinar la
verdad. Ese es justamente el problema. Tomemos la afirmación: No podemos determinar la verdad. Si el
relativismo fuera cierto, esta afirmación debería ser verdadera. Pero el
relativismo afirma que es imposible determinar la verdad o falsedad de algo; por lo tanto, es imposible saber si
esa afirmación – No podemos determinar la
verdad – es verdad. El relativismo se autorrefuta, por eso cae en el
absurdo, porque la verdad existe.
En realidad, la gente decide continuamente qué cosas
damos por verdaderas y cuáles por falsas. Supongamos que intentas
infructuosamente comunicarte con un amigo por teléfono. ¿Qué se te ocurre
pensar? Como vives en un edificio, quizá te encuentres en una zona donde la señal
no llega. Como sabes que el celular se te cayó al piso, tal vez pienses que se
dañó. El asunto es que decidimos qué cosas damos por verdaderas o falsas todo
el tiempo; en función de los datos disponibles, intentamos encontrar una
explicación que tenga sentido.
No hay diferencia entre esto y la verdad que las
religiones se atribuyen. Los cristianos creen que las enseñanzas de la Biblia
sobre Dios, la humanidad, la historia, la naturaleza, y nuestra vida son la
mejor explicación del mundo y de la experiencia humana.
Esto no implica que sea necesario probar
irrefutablemente todas las enseñanzas cristianas antes de creer que el
cristianismo es verdad. Basta observar la complejidad de la naturaleza para
deducir que tiene que haber un Creador que les dio origen. Podemos observar
nuestra propia conciencia y la noción que tenemos del bien y del mal, y
concluir que debe haber un Ser supremo que determina el bien y el mal. Podemos
ser testigos de vidas transformadas para mejor cuando las personas siguen de
veras las enseñanzas del Señor Jesús y comprenden que Dios es el dador de una
vida nueva y auténtica.
Piensa en las
consecuencias
Al intentar discernir la verdad de las afirmaciones sobre Dios, recuerda que Dios en Sí Mismo
no es un objeto ni una afirmación que pueda comprenderse. Dios es una persona.
Por lo tanto, el verdadero conocimiento de Dios será personal. El Señor Jesús
dice: “Si se mantienen fieles a mis enseñanzas, serán realmente mis discípulos;
y conocerán la verdad, y la verdad os hará libres” (Juan 8:31-32). Para conocer
la verdad que nos hace libres es necesario convertirse en discípulo del Señor
Jesús, estar dispuesto a aprender de Él y ser Sus seguidores. Conocer a Dios es
más que entender una lista de verdades: es conocer a Dios a través del Señor Jesús.
“No confiamos
porque existe “un Dios”, sino porque existe este Dios en particular.”
------------------------
Pregunta 04
¿Acaso alguien puede determinar el bien y el mal?
Suposición
Cada individuo decide qué está bien y qué está mal.
Nadie puede decirle a otra persona qué está bien o qué está mal.
Cuestionamiento
Llevemos esta idea a su conclusión lógica.
Si la suposición fuera correcta, ¿cómo sería posible
siquiera responder las siguientes preguntas?
- ¿Está bien que dañemos
el medio ambiente?
- ¿Vale la pena intentar
acabar con la pobreza extrema?
- ¿El racismo es inmoral?
¿Y la discriminación sexual?
Si no es posible determinar el bien y el mal,
tampoco será posible afirmar como deberíamos conducirnos en las situaciones
anteriores. ¿Cómo podemos luchar contra el mal en este mundo o defender el bien
si no estamos en condiciones de afirmar que algo es mejor o peor que otra cosa?
Por el contrario, para hacer que este mundo sea un mejor lugar para todos,
deberíamos poder afirmar que algunas conductas son malas para todos (tales como
el racismo, el genocidio y la destrucción del medio ambiente) y que otras
conductas son buenas para todos (tales como ayudar a los pobres, defender los
derechos civiles y proteger a los niños).
Esta suposición no solo es peligrosa en lo que atañe
a los problemas sociales y mundiales, sino que pocas personas son consecuentes
cuando la ponen en práctica. Imagínate que vas caminando por la calle y te
roban la billetera, tu ipod y tus joyas. Te disgustas, ¿no? ¡Aguarda un
momento! Si no es posible afirmar qué está bien o mal para todos, ¿quién eres
para decirle al ladrón que actuó mal? ¿Entiendes el problema? Afirmar que nadie
debería decir qué está bien y qué está mal puede parecer una estrategia útil
para evitar que los demás juzguen nuestras decisiones, pero basta con que algo
nos perjudique, como cuando nos roban, para que seamos los primeros en
reclamar: “¡Esto está mal!”
Piensa en las
consecuencias
Si Dios existe, tus decisiones no dependen solo de
ti. Hay decisiones correctas e incorrectas, hay acciones buenas y malas, cosas
que Dios quiere para tu vida y cosas que no quiere. Esto significa que debemos
dejar de insistir en que podemos hacer cualquier cosa que queramos, cuando lo
deseemos. El adicto a las drogas puede pensar que es libre porque puede
consumir cualquier sustancia a su antojo, pero no gozará de la verdadera
libertad hasta que no decida cambiar su modo de vivir y dejar de consumir
drogas. La verdadera libertad es aceptar el plan de Dios para nuestras vidas y
renunciar a todos los obstáculos que nos impidan cumplirlos.
“Si Dios existe y
fuimos hechos a su imagen, la vida tiene sentido verdadero y podemos tener
conocimiento verdadero por medio de lo que Él nos comunicó”
-------------
Pregunta 05
¿Cómo pueden los cristianos creer en Dios cuando la
evolución es un hecho comprobado?
Suposición
La evolución es un hecho científico que contradice
la Biblia.
Cuestionamiento
Si nos guiamos por lo que se presenta en las
películas, las revistas y los libros de textos escolares, parecería que la
evolución es un hecho incontrovertible. Sin embargo, hay motivos para poner en
tela de juicio esta idea… y muchos científicos están haciéndolo. Más de
setecientos científicos firmaron un documento en que plantean su escepticismo
sobre la evolución darwiniana y llaman a profundizar el análisis científico de
los méritos de la teoría de la evolución (https://dissentfromdarwin.org/).
Además, en el mundo natural, hay indicios que
sugieren la existencia de un Creador. Muchas cosas en la naturaleza parecen
tener un diseño, y cuando hay un diseño aparente, con toda probabilidad existe
también un diseñador. Supongamos que encuentras una computadora en perfecto
estado en un terreno baldío. Nada te hará pensar que los componentes de esa
computadora de pronto se conectaron precisamente para armar ese aparato
complejo. En cambio, la mejor explicación será que, dado que la computadora
parecer haber sido diseñada para funcionar de una manera en particular, seguramente
hubo un diseñador que la armó. Los científicos continuamente aprenden más y más
sobre la enorme complejidad de la vida biológica y sus funciones: la
información contenida en el ADN, los patrones matemáticos presentes en la
naturaleza, las complejas funciones celulares, etcétera. Hay muchas cosas
naturales que parecen estar diseñadas para cumplir funciones específicas: no
parecen ser accidentes aleatorios de la naturaleza. La presencia del diseño es
indicio de un diseñador, un Creador, que trasciende el mundo natural. (Escríbanos
a todoelconsejodedios@gmail.com
para conocer más sobre estos ejemplos de diseño y las debilidades de la teoría
de la evolución.)
Piensa en las
consecuencias
A veces se cree que la evolución es la verdad no
tanto por las supuestas pruebas científicas sino debido a una cosmovisión
conocida como naturalismo. El
naturalismo afirma que el universo es un sistema cerrado de materia y energía.
Lo único que existe es el mundo material; por lo tanto, creer en Dios, o en
cualquier cosa espiritual, es creer en una fábula.
Tomemos la pregunta: “¿Cómo se creó el ser humano?”.
Si se parte del naturalismo, solo es posible postular que la existencia de la
humanidad se debe a procesos naturales sin propósito. Esto implica que la
evolución (o cualquier proceso semejante) es la única posibilidad. Como el
naturalismo descarta a Dios desde el principio, los seres humanos deben ser un
hecho fortuito de la historia natural. En cambio, si no partimos del
naturalismo y aceptamos la posibilidad de que pueda existir algo más aparte del
mundo material, caben otros postulados para explicar el origen de los seres
humanos. Por ejemplo, pueden haber sido formados por un Dios que creó la vida y
que nos diseñó con un propósito.
-------------------------
Pregunta 06
Si Dios existe: ¿Por qué hay tanto mal en el mundo?
Suposición
Dios no causaría las espantosas tragedias que
ocurren a diario en el mundo. Si hay maldad en el mundo, Dios no puede existir.
Cuestionamiento
Todas las religiones tienen que responder por qué el
mundo no es como desearíamos que fuera. Tengamos en cuenta estas cuatro
aseveraciones sobre la manera en que el cristianismo responde a esta pregunta.
1. Dios no causa ninguna cosa mala
Adán y Eva, los primeros seres humanos, rechazaron
la autoridad de Dios y decidieron hacer las cosas a su manera. El resultado
dista mucho de ser agradable. El pecado y la maldad entraron en el mundo y
desde entonces la humanidad ha tenido que vivir en el mundo “caído”. Dios no
obligó a los seres humanos a rechazar Su bondad, sino que les dio libertad para
elegir; aun cuando eligieron mal. Si consideramos el mal que hay en el mundo –
los asesinatos, las estafas, los engaños, la tortura, la guerra y la esclavitud
– veremos que los perpetradores son seres humanos, no Dios. A veces, Dios
interviene para evitar la maldad y proteger a las personas, pero otras veces
deja que los seres humanos causen perjuicios.
2. Dios permite que los seres humanos decidan
libremente, aun cuando decidan mal, para permitirles elegir el amor.
Supongamos que en un cuento de ficción el rey le
dice a la doncella: “Por tu lealtad hacia mí, puedes elegir al hombre con quien
quieras casarte”. La doncella elige a un pobre fracasado y entonces el rey le
dice: “No lo permitiré”. Eso no es elegir. Supongamos que Dios interviniera
todo el tiempo e impidiera que las personas hicieran el mal. ¿Tendríamos
realmente libertad de decisión? De modo alguno, porque solo podríamos elegir
bien. Decidir obrar bien implica optar por conducirnos con amor. Para poder
decidir amar es necesario que también tengamos la opción de no amar. Dios
quiere que lo amemos a Él y a los demás por voluntad propia. Un amor por
obligación o por necesidad no es realmente amor.
3. Creer en el mal supone la existencia de Dios.
Cuando alguien dice que Dios no puede existir porque
hay maldad en el mundo, está suponiendo que el mal existe. La mayoría de la
gente opina que la esclavitud es mala: es un sistema injusto, está mal. Sin
embargo, en un mundo sin Dios ¿qué significaría considerar que la esclavitud, o
cualquier otra cosa, son “malas”? ¿Acaso la esclavitud es mala porque la
mayoría de las personas la rechazan? ¿Es mala porque está prohibida legalmente?
No. La esclavitud es mala aun cuando la mayoría de la gente opine que está
bien. La esclavitud era mala cuando los gobiernos declaraban su legalidad y
seguirá siendo mala aun si todos los gobiernos la legalizan.
Para poder afirmar que algo es bueno o malo, las
personas necesitan una referencia del bien y del mal que esté por encima de
cualquier ley humana. Y si el bien y el mal trascienden a los seres humanos,
esto significa que Alguien por encima de la humanidad debió establecer estas
leyes: un Ser supremo del que depende la verdad absoluta sobre el bien y el
mal. En un universo sin Dios, lo “malo” no sería otra cosa que aquello
rechazado por la mayoría de la gente o algo prohibido por la ley. Pero si el
bien y el mal son de verdad el bien y el mal, son absolutos y no dependen de
las opiniones de nadie ni de las leyes que se promulguen, este sería un
argumento a favor de la existencia de
Dios y no en contra.
4. No conocemos todas las razones que Dios tiene para
permitir ciertas cosas.
Consideremos la enormidad y la complejidad del
universo comparado con el conocimiento que tenemos de él. El progreso
científico puede llevarnos a creer que sabemos mucho, pero comparado con los
complejos mecanismos a nivel molecular y los millones y millones de galaxias
que aún restan explorar, nuestro conocimiento es relativamente pobre. Si Dios
existe, y es el Creador todopoderoso y omnisciente de este universo, no debería
sorprendernos que no podamos entender todas las razones que Dios tiene para
permitir determinados sucesos. Conocer todas las razones divinas – por qué permite
que haya desastres naturales o por qué permite que la gente se comporte de
determinada forma– sería tener la mente y la sabiduría de Dios. Sin embargo,
somos creación de Dios y debemos reconocer que no sabemos todas las cosas.
Piensa en las
consecuencias
A diferencia de los objetos de la ciencia, no
podemos observar a Dios con un microscopio ni crear un buen programa de
computadora para entenderlo. Dios es una persona, no un objeto. Podemos
desarmar y analizar un reloj para aprender cómo funciona, pero para conocer a
una persona es necesario cultivar una relación. Las relaciones requieren
confianza… confianza mutua. Dios nos pide que confiemos en Su bondad y en Su
amor, y que observemos cómo Su bondad vence al mal. El Señor Jesús promete a Sus
seguidores que El volverá (Juan 14:3). Dios erradicará el mal del mundo y dará
una vida nueva a quienes decidieron seguir al Señor Jesús (2 Pedro 3:9). Creer
en Dios es confiar en Él.
------------------------------
Pregunta 07
¿Cómo puede ser verdad la fe cristiana cuando los
cristianos han cometido tantas injusticias?
Suposición
En el curso de la historia, la iglesia cristiana ha
maltratado, esclavizado y matado a mucha gente. Por lo tanto, el cristianismo
no puede estar en lo cierto.
Cuestionamiento
Los cristianos y sus instituciones han emprendido
campañas militares en el nombre de Cristo, han esclavizado a diversos pueblos y
han explotado a los más vulnerables. Por desgracia, mucha gente ha tergiversado
algunos versículos de la Biblia para justificar sus atrocidades y se ha
atribuido el título de “cristiano” para obtener poder y riquezas. Estas
acciones son completamente contrarias a las enseñanzas de Jesucristo. Los
cristianos deben condenar decididamente las atrocidades cometidas en el nombre
de Cristo. Pero en la historia también hay muchos cristianos que pusieron en
práctica las palabras del Señor Jesús. Pensemos en los que pasaron su vida
ayudando a los pobres; en los que lucharon para abolir la esclavitud; y en los que
han dado sus vidas en lucha por la igualdad y los derechos civiles. Hay muchas
organizaciones cristianas que ayudan a millones de personas de todo el mundo,
con el propósito de luchar contra la injusticia, llevar alimento y auxilio
después de un desastre natural y procurar acabar con la indigencia.
La verdad del cristianismo no resultará de sumar y
restar los ejemplos de obras buenas y malas que los cristianos han realizado.
Ni tampoco será falso porque alguien que se llama cristiano no pone en práctica
lo que realmente significa ser cristiano. A modo de ejemplo:
Premisa: Algunas personas han cometido
atrocidades en el nombre de Cristo.
Conclusión: Por lo tanto, el
cristianismo es falso.
Es evidente que la conclusión no se deduce de la
premisa; sería como decir que la medicina debe ser falsa porque algunas de las
personas que dicen ser médicos son impostores. Las enseñanzas del Señor Jesús
son verdad hoy como lo fueron aquel primer día en que Él pronunció Su mensaje.
Piensa en las
consecuencias
El Señor Jesús describió Su ministerio en la tierra
con estas palabras: “El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha
ungido para anunciar buenas nuevas a los pobres. Me ha enviado a proclamar
libertad a los cautivos y dar vista a los ciegos, a poner en libertad a los
oprimidos” (Lucas 4:18). Como seguidores del Señor Jesús, hemos sido llamados a
seguir Sus pasos (no los de un movimiento u organización)y ser parte del plan
de Dios para llevar las buenas nuevas a los pobres y los necesitados, y para
rescatar a los perdidos y oprimidos.
---------------------------------
Pregunta 08
¿Por qué tendría que ser cristiano cuando hay tantos
hipócritas en las iglesias?
Suposición
Las iglesias están llenas de gente que no pone en
práctica lo que predica. Dicen que aman a todas las personas, pero en realidad
sólo se aman a sí mismas.
Cuestionamiento
La palabra hipócrita
deriva de una palabra griega que significa “actor escénico”.
Hipócrita es la persona que finge estar a la altura
de una norma elevada de justicia o de bondad, cuando en realidad está demasiado
lejos de alcanzar esa norma. El Señor Jesús no escatimó palabras cuando tuvo
que enfrentar a los hipócritas religiosos de Su tiempo. Los calificó de
“sepulcros blanqueados”. Luego agregó: “Por fuera lucen hermosos, pero por
dentro están llenos de huesos de muertos y de podredumbre. Así también ustedes,
por fuera dan la impresión de ser justos pero por dentro están llenos de
hipocresía y de maldad” (Mateo 23:27-28). Son palabras duras las del Señor Jesús;
las pronunció con la intención de sacudir a los jefes religiosos, para que
abandonaran la falsa idea que tenían de considerarse mucho mejor que todos los
demás.
Nadie es perfecto; ni dentro ni fuera de la iglesia.
Aun quienes tenemos las ideas más nobles
en alguna ocasión no podemos cumplir nuestros propios estándares. Dios quiere
que nos veamos como realmente somos: personas
que cometemos errores, que no siempre obramos bien, y decimos y hacemos
cosas lamentables. Por supuesto, esto significa que otras personas imperfectas
– incluso los cristianos- en ocasiones nos defraudarán. En el proceso de crecer
para ser más como el Señor Jesús, será inevitable no estar siempre a la altura
de nuestros estándares. La clave de progresar es el perdón: aprender a perdonar
a las personas nos decepcionan, pedir perdón a quienes hemos defraudado y pedir
el perdón de Dios; comprender que nadie está siempre a la altura de las
circunstancias y dejar de proceder como si fuéramos perfectos.
Piensa en las
consecuencias
El Señor Jesús relató la historia de un jefe
religioso y de un recaudador de impuestos que fueron al templo a orar (Lucas
18:9-14). (Los recaudadores de impuestos de aquella época tenían fama de cobrar
demás y quedarse con la diferencia). El líder religioso oró a Dios y le
agradeció porque él no era un pecador como el recaudador de impuestos. En
cambio, el recaudador de impuestos oró: “¡Oh Dios, ten compasión de mí, que soy
pecador!” El Señor Jesús dijo que el recaudador de impuestos arrepentido
“volvió a su casa justificado ante Dios. Pues todo el que a sí mismo se enaltece
será humillado, y el que se humilla será enaltecido”. Dios no quiere personas
complacidas consigo mismas, sino que quiere personas que busquen Su perdón,
porque Él tendrá compasión de todos los que se la pidan.
-----------------
Pregunta 09
Si Dios ama a todos, ¿por qué enviará algunas
personas al infierno?
Suposición
Un Dios de amor no enviaría a nadie al infierno. Si
Dios realmente amara a las personas, no castigaría con el infierno a quienes no
creen en Él.
Cuestionamiento
¿Qué es el infierno? Estar en el infierno es sufrir
la terrible separación de la bondad de Dios. Dios no quiere que nadie viva
apartado de Él, ni tampoco desea ni le complace que haya gente en el infierno
(Ezequiel 18:23). El infierno es lo contrario a todo lo que Dios quiere para la
humanidad.
¿Por qué, entonces, habrá gente en el infierno en
vez de estar en el cielo?
Dios es amor, pero los seres humanos obran sin amor,
por eso hay pecado y maldad en el mundo. Cuando hacemos el mal dañamos nuestras
relaciones con los demás, aunque no haya sido nuestra intención. La humanidad
hizo lo malo y rompió su relación con Dios. La gente niega a Dios, lo
desobedece, lo ignora y no creen en Sus palabras. Cuando procedemos de esa
manera, se rompe la relación que deberíamos tener con un Dios bueno y perfecto.
Como un hijo o una hija que abandona a sus padres, muchas personas rechazan la
verdad de Dios, lo desobedecen y no desean tener una relación con Él. El
infierno es el destino al que llega el individuo que huye de Dios. No todas las personas deciden aceptar el
ofrecimiento de Dios para reconciliarse con Él. Dios ofrece Su perdón, pero
algunas personas se alejan aun más de
Dios y prefieren vivir separadas de Él. Como un padre amante, Dios siempre está
dispuesto a aceptarnos y tener una relación con nosotros. Quiere que andemos
por el camino que nos lleva hacia Él y que no nos alejemos de Él; pero no nos
obligará a ello. Depende de cada uno de nosotros.
Piensa en las
consecuencias
Nadie puede hacerse suficientemente “bueno” para
obtener la vida eterna y evitar el infierno. El Señor Jesús hizo posible el
perdón para todos. Nuestra relación con Dios solo se puede transformar si
creemos en el Señor Jesús. La Biblia describe un encuentro del Señor Jesús con
una persona que deseaba saber más sobre esta transformación. La respuesta del
Señor fue: “Porque tanto amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito
(Jesús), para que todo aquel que en El cree, no se pierda, sino que tenga vida eterna. Dios no envió a su Hijo al
mundo para condenar al mundo, sino para salvarlo por medio de él” (Juan 3:16).
“Nadie sabe lo
malo que es hasta que intenta de verdad ser bueno”
-----------------
“Dios no puede
darnos felicidad y paz separados de Él, porque no existen fuera de Él, es
imposible”
----------------------
Pregunta 10
Cuando la vida nos golpea, ¿le importa a Dios?
Suposición
Puede que haya un Dios en algún lado, pero no se
interesa en mi vida. Si Dios me amara, haría algo para solucionar los problemas
de mi vida.
Cuestionamiento
Cuando la vida se complica y no entendemos lo que
Dios está haciendo, es fácil sentir que Él está ausente o que no le importa. A
pesar de todo, recuerda que Dios también entiende el sufrimiento; y no nos
comprende como un mero observador, sino como alguien que lo vivió en carne propia.
La Biblia enseña que el Señor Jesús no fue solo un gran líder, el salvador
perfecto y el maestro más sabio, sino que fue Dios mismo. En Jesús, Dios se
encarnó y nos demostró que sabe lo que es ser humano: el abandono, el
sufrimiento y la muerte. Estuvo dispuesto a morir y predijo su muerte: “…el
Hijo del hombre [Jesús] será entregado a los jefes de los sacerdotes y a los
maestros de la ley. Ellos lo condenarán a muerte y lo entregarán a los gentiles
para que se burlen de él, lo azoten y lo crucifiquen. Pero al tercer día
resucitará” (Mateo 20:17-19). El Señor Jesús no había cometido ningún delito,
pero murió como un delincuente.
Los seguidores del Señor Jesús seguramente perdieron
toda esperanza; poco sabían que la muerte del Señor no sería el fin de Su historia.
Tres días después de ser crucificado, el Señor resucitó a una vida nueva. Se
apareció a cientos de personas, Sus seguidores lo vieron y hablaron con Él,
incluso lo tocaron para confirmar que estaba realmente vivo (1 Corintios 15:6).
Hubo razones para el sufrimiento del Señor Jesús,
aunque ni siquiera Sus seguidores lo supieron en ese momento. Solo después
comprendieron que Su muerte en la cruz hizo posible que todos pudieran recibir
el perdón de sus pecados y reconciliarse con Dios. La resurrección del Señor Jesús
probó de manera concreta que Dios puede dar vida nueva a todos quienes la
acepten. Tal vez pareció que Dios estaba ausente mientras Jesús sufría, pero
estaba junto a Él todo el tiempo, para que todo obrara para bien.
Piensa en las
consecuencias
El Señor Jesús estuvo dispuesto a sufrir tanto
porque la vida de cada persona vale mucho para Él. No porque seamos buenos o
porque hayamos logrado algo grandioso, sino por quienes somos: seres creados y
amados por Dios. En la vida del Señor Jesús, podemos ver que Él se acerca y
camina a nuestro lado, comparte nuestros problemas y nos infunde esperanza para
que sepamos que el sufrimiento no es el final sino el principio de una nueva
vida.
“Dios está más
interesado que nosotros en nuestro futuro y nuestras relaciones “
- - - - - - - - - - - - - - -
Lectura complementaria (enlaces actualizados):