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6. LEA—UNA ESPOSA LEAL

¿Te has encontrado alguna vez en una situación en la que fuiste una víctima de las circunstancias? No trataste de involucrarte en el asunto, ni eras culpable; pero aún así, te encontraste metida en el problema. En este capítulo estudiaremos la vida de Lea, una mujer que se vio involucrada en una situación injusta.

Antecedentes de Lea

Lea era la hija mayor de Labán, un pastor de ovejas que vivía en Harán. Su padre le jugó una mala pasada a Jacob, el hombre que estaba enamorado de Raquel, la hermana menor de Lea. Labán le entregó a Lea como esposa en lugar de la que Jacob esperaba en la noche de bodas. Era la costumbre del país que la hija mayor debía casarse primero. 

Al analizar la vida de Lea, confío que aprenderemos cómo actuar correctamente aun cuando se haya cometido una injusticia con nosotras. Lea también nos da el ejemplo de ser una esposa leal a pesar de la mala situación en su hogar.

Jacob llega a casa de Labán

Jacob había estado huyendo de Dios por algún tiempo, pero mientras viajaba desde su pueblo hasta la tierra de su tío Labán, tuvo un sueño. Jacob llamó al lugar donde tuvo su sueño Bet-el, que significa “Casa de Dios”. El Señor le prometió a Jacob que dondequiera que fuere lo protegería y que regresaría sano y salvo a su casa. Jacob, por su parte, le prometió a Dios servirle y darle la décima parte de todo lo que Dios le diera.

Después de salir de Bet-el, Jacob finalmente llegó a la casa de su tío Labán. En el camino conoció a su prima Raquel que estaba cuidando las ovejas. Fue un amor a primera vista. Cuando Raquel se enteró de que Jacob era un pariente, corrió a contarle a su padre del arribo del joven.

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Labán recibió cálidamente en su hogar a Jacob después de que él le relató todo lo que le había sucedido. Entonces Jacob quiso trabajar para su tío, y acordaron que Jacob trabajaría siete años a fin de obtener a Raquel como su esposa.

Raquel y Lea eran distintas

Genesis 29:16-18 nos narra las diferencias entre Lea y su hermana:

16 Y Labán tenía dos hijas: el nombre de la mayor era Lea, y el nombre de la menor, Raquel.

17 Y los ojos de Lea eran delicados, pero Raquel era de lindo semblante y de hermoso parecer. 

18 Y Jacob amó a Raquel, y dijo: Yo te serviré siete años por Raquel tu hija menor.

La Biblia no explica cuál era el problema con los ojos de Lea. Pero es obvio que había una gran diferencia en el aspecto físico de estas hermanas. Jacob se sintió atraído hacia Raquel.

Jacob trabaja para casarse con Raquel

Jacob no solamente se sintió atraído por Raquel sino que la amó muchísimo como vemos en Génesis 29:20: “Así sirvió Jacob por Raquel siete años; y le parecieron como pocos días, porque la amaba”.

Al finalizar los siete años, Jacob le recordó a Labán su promesa. Así la boda se preparó y según la costumbre, la novia fue llevada al aposento del novio. Dicho cuarto estaba completamente oscuro y silencioso. Jacob no se dio cuenta hasta la mañana siguiente que Labán lo había engañado al darle a Lea en vez de a Raquel.

Labán tenía la excusa de que no podía dar en matrimonio a su hija menor antes que la mayor. Eso era verdad según la costumbre, pero no era lo que los hombres habían acordado. Lea se encontró casada con el hombre que amaba a su hermana. La Biblia nos dice que después que Jacob y Lea convivieron una semana, recibió también a Raquel luego de prometer trabajar otros siete años más para su tío Labán. 

Una situación terrible

No puedo imaginarme una situación peor que esa. La Biblia no nos detalla los problemas de ese hogar pero describe un problema en particular en Genesis 29:30-31:

30 Y se llegó también a Raquel, y la amó también más que a Lea; y sirvió a Labán aún otros siete años.

31 Y vio Jehová que Lea era menospreciada, y le dio hijos; pero Raquel era estéril.

Dios recompensó a Lea con hijos. Raquel tuvo que escuchar el llanto y los balbuceos de sus sobrinos, sin tener ella ni un solo hijo.

Como Lea no era tan querida como Raquel, probablemente pasaba más tiempo buscando al Señor para recibir fortaleza. La Biblia establece que Lea reconoció el cuidado de Dios en el nacimiento de cada uno de sus hijos. Raquel tenía el amor de Jacob, pero una cosa es evidente en la vida de Lea: a pesar de las circunstancias, fue una esposa verdadera y fiel. No le dio la espalda a Jacob, ni desistió en su empeño por ganar su amor. 

La actitud de adoración de Lea para con el Señor se revela en los nombres que les dio a sus hijos, como lo cuenta Génesis 29:32-35:

32 Y concibió Lea, y dio a luz un hijo; y llamó su nombre Rubén, porque dijo: Ha mirado Jehová mi aflicción; ahora, por tanto, me amará mi marido. 

33 Concibió otra vez, y dio a luz un hijo, y dijo: Por cuanto oyó Jehová que yo era menospreciada, me ha dado también éste. Y llamó su nombre Simeón.

34 Y concibió otra vez, y dio a luz un hijo, y dijo: Ahora esta vez se unirá mi marido conmigo, porque le he dado a luz tres hijos; por tanto, llamó su nombre Leví.

35 Concibió otra vez, y dio a luz un hijo, y dijo: Esta vez alabaré a Jehová; por esto llamó su nombre Judá; y dejó de dar a luz.

Más adelante en Génesis 30 vemos que Raquel estaba tan celosa de los hijos de Lea que le entregó a Jacob su criada Bilha para que le diera hijos. Esta criada dio a luz a dos hijos más.

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Entonces Lea también le dio su criada Zilpa a Jacob, y ésta le dio dos hijos más. Después Lea tuvo dos hijos más y una hija a la cual llamó Dina, quien es la primera niña cuyo nombre se menciona en la Biblia al momento de nacer. 

Por fin Raquel tuvo un hijo a quien llamó José, y al dar a luz a su segundo hijo llamado Benjamín, ella murió en el parto. Su fallecimiento es el primer registro en la Biblia de una muerte al dar a luz.

Lea es bendecida por Dios

Veamos qué pasó con Lea. La Biblia no nos da muchos detalles pero sabemos que produjo a la mitad de los líderes de las doce tribus de Israel (Rubén, Simeón, Leví, Judá, Isacar y Zabulón). Lea sobrevivió a su hermana, y finalmente tuvo su lugar como única esposa de Jacob. El Señor la siguió bendiciendo. De su hijo Judá vino la línea Mesiánica del rey David de la cual nació el Señor Jesús. Otro de los hijos de Lea dio origen a la tribu sacerdotal de Levi, de donde descendían Moisés y Aarón.

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Pensamientos finales

Cuando pienso en Lea, creo que su vida fue un verdadero ejemplo de fidelidad a Dios, tanto en el hogar de su padre como después de casada. No leemos en ninguna parte sobre ninguna queja o amargura por su aspecto físico o por la injusta situación que le tocó vivir en su matrimonio. ¡Qué dulzura de mujer! Excepto cuando le entregó a Jacob su criada, Lea parece haber hecho siempre lo correcto y Dios la bendijo.

Es un buen momento para examinarnos a nosotras mismas. La vida de Lea nos desafía a aceptar nuestras circunstancias, no importa cuales sean. Si aceptamos nuestras circunstancias adversas y buscamos la gracia y ayuda de Dios, Él nos pondrá en su debido momento por encima de esas circunstancias. Sus bendiciones no tienen límite para quienes perseveran en buscarlo.

Temas de discusión

  • ¿Cómo describe la Biblia las diferencias entre Lea y su hermana?
  • ¿De dónde crees tú que Raquel y Lea habrán sacado la idea de ceder sus criadas a su marido para que tuvieran hijos con él? ¿Qué nos enseña acerca de ser buenos ejemplos para nuestros hijos? 
  • Describe con tus propias palabras la situación de Lea.
  • Describe de qué modo Dios bendijo a Lea. 
  • ¿Crees que Jacob habrá llegado a amar a Lea alguna vez?
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